I+D (parte 0)

Este es el primer post sobre I+D pero no será el ultimo, espero que el próximo sea para alabar la orientación que ha dado el gobierno a este tema aunque temo que va a ser que no.

Nuestra economía ya no está en la liga de los países de bajo coste, hemos subido un nivel y debemos producir artículos de calidad y con un buen nivel tecnológico. Debemos ser innovadores y desarrollar productos que nos diferencien de nuestros competidores. Para ello necesitamos invertir en I+D una parte importante del PiB.

El gobierno debería facilitar y apoyar a las empresas en esta tarea por el bien común de todos con la educación y formación, recursos públicos y legislativamente para apoyar a las empresas que investiguen.

La situación actual de la I+D en España está muy lejos de lo que debería ser, si bien hemos mejorado sensiblemente en los últimos años aun estamos en la cola de la UE cuando deberíamos estar en cabeza para recuperar todo el terreno perdido.

El principal problema es que no hay cultura de I+D, se ha perdido por tantos años de ir a remolque de los demás, históricamente las cosas nos han ido bien cuando hemos sido innovadores pero de eso hace muchos años.

Una prueba de la poca cultura en I+D que hay en el país es que mientras se habla de una nueva ley de economía sostenible que debe impulsar un nuevo modelo económico se recorta la partida de I+D en los presupuestos, estamos en lo de siempre el gobierno dice cosas que no se cree.

Bocados para reflexionar

Voy a dejar una historia oriental y una cita para que reflexionéis como debería actuar en todos los ámbitos y como no en la política.

La primera es del prologo del Arte de la guerra de Sun Tzu en la versión de Thomas Cleary:
Un noble de la antigua China preguntó una vez a su médico, que pertenecía a una familia de grandes médicos, cuál de ellos era el mejor.
El médico, cuya reputación era tal que su nombre llegó a convertirse en sinónimo de ciencia médica en China, respondió: “Mi hermano mayor puede ver el espíritu de la enfermedad y eliminarlo antes de que cobre forma, de manera que su reputación no alcanza más allá de la puerta de la casa.
El segundo de mis hermanos cura la enfermedad cuando todavía es muy leve, así que su nombre no es conocido más allá del vecindario.
En cuanto a mí, perforo venas, receto pociones y hago masajes de piel, de manera que, de vez en cuando, mi nombre llega a oídos de los nobles".

La cita es de Otto von Bismarck: El político piensa en la próxima elección; el estadista, en la próxima generación.

Esta es muy conocida, está claro que el estadista es una rara avis en nuestros días.

Espero que disfrutéis reflexionando sobre la historia y la cita , en los próximos post hare bastantes referencias a ellas.